domingo, 31 de julio de 2011

martes, 26 de julio de 2011

Maraquero sagrado


Para evitar que llueva azufre como cada primavera, los chamanes de la tribu tienen que implorar el favor de sus despiadadas deidades usando máscaras y maracas.

jueves, 21 de julio de 2011

Un pingüino escalofriante

La desaparición del equipo de científicos que realizaba investigaciones cerca del polo sur conmocionó al mundo entero.
En sus últimas entradas, la bitácora de viaje narra el descubrimiento de un pingüino albino que mostraba un comportamiento completamente distinto al resto de su grupo.
Entre los restos del misterioso incendio que destruyó el campamento se encontró un cámara con algunas fotografías que pudieron ser rescatadas. Ésta es la última de ellas.


Los lentes que usa el pingüino en la imagen fueron identificados como propiedad del jefe de la expedición, cuyo cadáver aún no ha sido hallado.

domingo, 17 de julio de 2011

Nuevos descubrimientos arqueológicos

Todo el pueblo de Huichatepec saltó de gusto cuando se enteró de que unas excavaciones realizadas en sus estériles tierras sirvieron para descubrir piezas de valor arqueológico incalculable.
Esto sin duda atraería manadas de turistas, con la correspondiente derrama económica, que rescataría a Huichatepec de su milenaria historia de miseria e indiferencia.


Herr Klaus Holliger, amante de las culturas prehispánicas, vivía apaciblemente su retiro en una casa cerca de Huichatepec y quiso aprovechar la ocasión para construir un museo que albergara las piezas recién descubiertas; un museo que llevara su nombre, claro está.

Habló con algunos habitantes del lugar, y éstos le llevaron dos o tres figuras que a su juicio representaban deidades desconocidas. Herr Holliger, lleno de emoción, agradeció el gesto con un fajo de billetes.

Los billetes eran de a peso, pero lograron el efecto deseado; hombres, mujeres y niños hacían fila frente a la casa del alemán para entregarle figuras cada vez más extrañas.
Holliger consiguió los inversionistas americanos y europeos necesarios para financiar el museo de sus sueños y en un par de años logró atestarlo de piezas provenientes de la cultura "Tepochtla", como le dio por llamarla.

Desafortunadamente, este personaje murió poco después. Cuentan que en una ocasión fue a visitar Huichatepec y para su sorpresa (demasiado fuerte para su pobre corazón) encontró que toda la población había abandonado su trabajo habitual para moldear, hornear y transportar "vestigios tepochtlas" al febril ritmo que demandaba el mismo Herr Holliger.

Claro que esta versión no se cuenta, pues el museo sigue en pie hasta el día de hoy y todavía atrae uno que otro turista.

lunes, 11 de julio de 2011

A media noche


En lo que termina de pasar a mejor vida, Ramón Torres tiene que levantarse puntualmente a las 11:45 de la noche para ir a trabajar.
Su empleo consiste en vestirse de sábana y arrastrar cadenas por el cementerio, para asustar a los locales y atraer turistas.